Teoría de costos

Leyendo un libro de economía encontre un concepto que me llamó poderosamente la atención: "El costo de oportunidad".

Indagando sobre sus fundamentos pude apreciar que remite al valor que podría haber generado ese recurso (comunmente dinero) en una ocasión semejante... lisa y llanamente es lo que he dejado de ganar por realizar mi elección.

Si lo traducimos a la vida real, podría decir que el costo de oportunidad por ejemplo de ir a ver un river-boca durante el dia de la madre (como ridiculamente viene siendo todos los años) es la felicidad de mi querida madre por el hecho que le produce estar con su hijo mayor ese día.

En el potencial caso que el partido me otorgue una alegría proporcionalmente mayor a la tristeza que me genera tal disgusto a mi vieja, el resultado es positivo. De no ser asi, sería negativo.

Es solo un ejemplo..y si lo hice fue porque se que mi madre no se enoja [SIC].

Traducir la vida a elementos cuantitativos resulta, al menos complejo.

Es facil medir cuanto dinero uno tiene en el bolsillo, cuantos contactos en su msn o direcciones de mail en su casilla de correo.

Pero ¿Como hago para medir la felicidad? ¿La alegria? ¿La tristeza?

Partamos por el principio ¿Son valores absolutos o relativos?.
Para mi son absolutos. Estoy contento o estoy triste. No debo compararlo con otros momentos, porque de ser asi, los momentos de alegria serían solo los extremos (aunque quizas lo mismo pasaria con los mas feos).

He escuchado en numerosas oportunidades al comun de la gente manifestando una frase que me disgusta bastante: "(X persona) tiene todo...no le falta nada" ¿Que es tener todo?

Para la mayoria de la gente simplemente es plata. Hoy no voy a meterme en ese tema sino con la liviandad que se opina de los demas...

¿Cuales son los costos que cada uno paga (o pagó) por tener lo que tiene (sea mucho o poco)?

Una vieja película llamada "El violinista sobre el tejado" ténía como eje principal a su protagonista, el viejo Tevie, cantando "Si yo fuera rico..."... y contaba todas las cosas que haría con su dinero. Lo que nunca expresaba era como llegaría a ser rico.

No es lo mismo trabajar 30 años que ganarse la lotería. No es lo mismo ser un intermediario que cargar con una empresa, los empleados y sus familias en momentos de crisis económica. Ni siquiera es lo mismo ser primera generación que segunda dentro de un emprendimiento.

Está claro que el que la gana facil, la gasta facil. Ahora, este viejo se llenaba la boca contando todo lo que haría y cuan poco trabajaria como si la plata le fuera a llover del cielo..

Haciendo una vaga analogia, me hace acordar a una frase mas cotidiana: "yo si tuviera la casa libre, la pondría todos los sabados"....sisi...¿y te levantarías los domingos a limpiar? ¿Y te bancarias las discuciones con tus viejos cada vez que rompiste algo? ¿Y te ocuparias de ir a comprar todo lo necesario para atender a la gente? ¿Y le harias frente a las quejas de los vecinos?

Está claro que todo eso no se ve al momento de lanzar frases o especular como cada uno actuaría en una situacion determinada.

La superficialidad la vemos todos. Los costos no. Hablar de lo ajeno sin contemplar lo que cada persona ha dejado de lado por cumplir con una meta (planteada o heredada) puede ser tomado como una muestra importante de desagradecimiento.

Si pusieramos en la balanza todos los costos que implican acceder a determinadas cosas, desestimo que el comun de la población estaría de acuerdo en pagarlos.

A mi corta edad, por ejemplo, veo lo que han logrado tanto mis padres como los padres de muchos amigos con esfuerzo, trabajo y dedicación al laburo. Realmente no se si estoy dispuesto a hacerlo.

Me gusta la vida que llevo, no soy un necio. Me gusta trabajar. No me molesta levantarme temprano, pero el país en el cual interactuamos nos genera un desgaste físico y psicologico constante.

Lo peor de todo es que ni la riqueza ni la felicidad son proporcionales a lo que uno trabaja por llegar a ella.

Sería tan ideal como utópico poder elegir el punto de equilibrio de cada uno...como si fuera una ecuacion matematica: yo quiero llegar a tal cosa, tengo que hacer A, B y C...pero estamos muuuuuy lejos de eso...sobre todo por estos lados del mundo.

Recuerdo cuando en la escuela las maestras solían decir "estudiá para sacarte 10, porque si estudias para 6 y te va mal, es un 4 o un 3". Obviamente me parecía una pedorrada...pero hoy creo que la vida probablemente sea eso.

Nadie nos asegura el exito en ningun emprendimiento (y no hablo solo de lo laboral).

Está en cada uno en ponerse objetivos respetando sus deseos de tranquilidad y felicidad, sin dejarse llevar por el contexto.

No es mas vivo quien mas trabaja y mas roto se muestra. Mucho menos quien mas se queja.

El mas vivo es el que mas vive...asi de literal como suena.

Cada ser humano tiene el derecho de elegir cual es el ámbito que lo hace feliz y por consiguiente el mejor camino para dirigirse hacia dicho rumbo.

Los hechos imponderables aparecen siempre...Lo muestra la película match point, a veces la pelotita pega en la red de tenis y cae para un lado y a veces cae para el otro.

El resultado no debería ser mas que la consecuencia final de un proceso y no el basamento de un camino. Sino, se desvanecería todo muy facilmente.

A mi entender, la verdadera riqueza está en encontrar el espacio para disfrutar de cada momento.

Una vez se ocurrió algo bastante loco: Pensé en anotar un hecho que me haya sucedido diariamente...como si con el tiempo pudiera acordarme de cada dia en particular por algun acontecimiento importante...luego de unos minutos me di cuenta que era una hermosa utopía, pero que mi cerebro no estaba capacitado (ni aún leyendo) para almacenar 3650 cosas sucedidas en 10 años.

Sin embargo, mas allá de no anotarlo, trato de vivir de ese modo. Es dificil, lo se. A veces sale, a veces no, pero la idea es que cada momento tenga su condimento.

Que no pasen al pedo. Que no se pierdan.