jueves, 28 de abril de 2011

Histeria general

No se porque pero soy parte. En un principio pense que era por la facultad, luego por el trabajo, pero me termine dando cuenta que es una cuestion social.
En todos los dialogos, quejarse es un punto en comun. Parecería que fuera un vicio o un elemento basico del mundo que hoy transitamos...

"no sabes los quilombos que tengo". Parece que todos somos cirujanos y estamos con el higado para transplantar...y lo peor de todo es que estoy inmerso en esto.

Vuelvo a mi casa, me relajo para escribir, pero mañana arranca otro dia y vuelve todo a empezar.

Otra vez a la rutina, a solucionar problemas constantemente, a escuchar quejas, problemas y tratar de explicarle a la gente que el mundo sigue girando si los plazos se estiran mas de la cuenta.

Odio faltar a mi palabra, pero a veces pasa..todo no depende de mi...ni siquiera el circulo minimo que remite a mi trabajo, entonces hay cosas que se me escapan...

Estando en muchas charlas de diversos grupos de personas, he notado que el comun de la gente piensa que el otro mira al cielo y ve caer plata mientras que ellos que se matan laburando, solucionando los problemas de su terrible rubro.


La unica conclusion a la que llego, es que a todos nos pasa lo mismo. Y cuando no nos pasa, nos hacemos creer que si nos pasa, porque sino no vivimos o no trabajamos en Argentina.

¿Por qué tenemos esa necesidad de sumergirnos en una histeria general? Hoy el estress es palabra tipica entre la gente de 20 y 30 años... filas de hombres pasan por las oficinas de caida de pelo por sus problemas de trabajo, los psicologos tienen trabajo asegurado, los hospitales estan llenos de ataques de panico y los cementerios de gente que se creía imprescindible.

Si no nos cuidamos a nosotros mismos, el que nos cuide nos va a sacar plata.

La gente que está sin trabajo esperan a ser empleados, los empleados no ven la hora de pasar a ser dueños y los dueños de las empresas, siendo esclavos de sus trabajos, no ven la hora de retirarse.

¿Quien nos entiende? La busqueda constante es buena, alimenta el estado de animo, genera proyectos, revitaliza al ser humano...pero el tema es ¿Para qué buscamos?

¿Cuál es el objetivo de trabajar para ahorrar dinero si no tenemos un objetivo en el cual gastaremos dicho dinero? O acaso trabajamos para darle la plata a un banco?

No estoy en contra del ahorro, todo lo contrario. Me creo una persona conservadora desde el punto de vista de inversiones financieras pero creo que el crecer "porque si" es parte de la disociación en los estandares sociales que sufrimos como conjunto.

Aborrezco las herencias..no por quien la recibe sino por quien las da. Creo que lo mejor que le pueden dar los padres a sus hijos no es dinero en efectivo ni propiedades, sino la posibilidad de desarrollarse en lo que deseen o un ambito en el cual crecer profesional y personalmente.

No contemplo el hecho de que una persona trabaje hasta los 75 años y recien despues empiece a gastar su dinero. Me parece una barbaridad....ya ni se acuerdan cuanto les costó ganarla! Es gravisimo.

Despues de 30 años de laburo, mi viejo siempre me dice "sabés cuantos gigantes vi caer"...no dudo en que tenga razón. Tanto las malas épocas vividas como la mala administración ha llevado a la quiebra a empresas/personas que se veían muy lejanas de eso...muchas veces, lo que mata es la ambición.

La ambición de llegar "a ser"...a ser que? es mi pregunta. No hay mayor ambición que la de ser feliz.

Cada vez que me subo a un avión y se mueve un poco se me desaparecen todos los proyectos a largo plazo. Proyectar incluye postergar. No soy un improvisado, entiendo que para vivir hay que planear, pero los imponderables son tantos en este mundo que los planes se ven ultra modificados...entonces para que estuvimos planeando antes? Al pedo total.

Al fin de cuentas, llego siempre al mismo punto. Buscar es lindo, genera adrenalina, motivación, auto-estima, deseos, ganas....pero mejor que buscar, es encontrar.

3 comentarios:

  1. Lo mejor es poder generar un equilibrio entre ese BUSCAR y el ENCONTRAR. Es decir, no es bueno convertir los medios en fines y quedarse buscando para siempre sin saber para qué ni qué se busca, ni tampoco quedarse satisfecho con lo que se encuentra, sin generar nuevas expectativas u objetivos.
    La ambición desmedida es un extremo pero, en su justa medida, es el ingrediente que nos incentiva a seguir viviendo.
    Muy buen texto

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  2. Yo ahorro con el fin de gastarla cuando tena un objetivo claro.

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  3. Coincido en partes en el texto y en parte con los comentarios. Muy bueno el texto y la forma contada.

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